Ciego de Ávila entre las mejores provincias del país en la agricultura urbana y suburbana

Ciego de Avilña cerró el 2012 con una producción de 48 000 toneladas de hortalizas y verduras, con un plan superior en 1 000 para el 2013, lo que demuestra la validez de un movimiento dentro de la agricultura urbana y suburbana, que comenzó en 1987 por iniciativa del General de Ejército Raúl Castro.

Recientemente, el territorio fue objeto de un recorrido por el Grupo nacional que atiende ese sector y se ubicó, en el momento de la visita, entre una de las Cuatro mejores del país, solo superada por Sancti Spiritus, Cienfuegos y La Habana.

Los municipios de Ciego de Ávila, Baraguà y Primero de Enero están entre los de avanzada, mientras Venezuela, Majagua y la dirección del Ministerio del Interior (MININT), en Morón, marcaron la retaguardia.

En esta emulación nacional encaminada a producir se le otorgó la Triple Excelencia, máxima categoría, al patio de hortalizas de Ramón Rivero en Primero de Enero y para el de Manolo de Acosta, de Bolivia, así como para las fincas La Aguadita de CATEC, en Ciego de Ávila y la de autoconsumo de caza, en Ciro Redondo.

La existencia de más de 120 000 parcelas, patios y huertos caseros, constituyen fruto de una gestión sistemática de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR), con el apoyo de la Agricultura en cada municipio.

Ese potencial, más los organopònicos, los semi protegidos y los huertos intensivos, es lo que hacen que la provincia avance cada año, aunque pudiera ser más si se tuviera en cuenta este pensamiento de José Marti: “Tierra, cuanto haya debe cultivarse y con varios cultivos”, pero mientras no se aligeren los trámites para la entrega de tierras y los precios de insumos, herramientas y otros recursos no sean accesibles, los resultados no serán los que espera el pueblo.

Pero ahí no se concentran las limitaciones, pues no se cumplen con las normas tecnológicas para cada cultivo, los canteros no se aprovechan al máximo y en las labores ecológicas no están presentes las medidas para el combate eficiente de las plagas.

La dirección de la Agricultura en Ciego de Avila conoce de cada debilidad y establece disposiciones para erradicarlas, pero la inestabilidad en la fuerza de trabajo, debido a la desmotivación por el sistema de pago, es su gran obstáculo.

A los Consejos municipales de la administración y a la Agricultura a ese nivel, les corresponde buscar opciones rápidas, sin mucho experimento, para que se cumplan los
Lineamientos del VI Congreso del Partido referentes a este tema.

Se dicen en los mismos que es imprescindible, (205) , “Desarrollar con efectividad el programa de autoabastecimiento alimentario municipal, apoyándose en la agricultura urbana y suburbana y el de ejecutar ese programa (206), “aprovechando eficientemente las tierras que rodean las ciudades y pueblos, con el menor gasto posible de combustible e insumos importados, empleando los propios recursos locales y con amplio uso de la tracción animal”, una lógica y una exigencia que no debe quedar en portafolios, archivos de oficina y reuniones.

Ciego de Ávila con más de 300 hectáreas dedicadas hoy al Programa de la Agricultura Urbana y Suburbana, con tierras muy fértiles, tiene todas las condiciones para ser de forma permanente de las mejores del país en este movimiento, cumpliendo con sus crecientes exigencias.

Los avileños le darán un voto a favor si en surtido, calidad y precios motivan en casa, cada día, la satisfacción.